Todo pasa por el Colombino

Hablar de las novedades en cuestión de fichajes resultaría un poco estúpido sin saber el papel que va a tener que afrontar el Real Zaragoza la campaña que viene. Y ese papel pasa por el Colombino. La necesidad imperiosa de sacar al menos un punto conduce al Real Zaragoza a una situación clave en la última jornada de Liga.

La trascendencia que adquirió todo lo acontecido el pasado sábado en la Romareda nos hizo olvidar que el Real Zaragoza perdió la clasificación matemática para la UEFA. El partido de hoy adquiere un matiz peculiar cuando observamos las condiciones en que ha llegado el equipo a la última batalla. Con Diogo "secuestrado" en Uruguay, Sergio García lesionado, Diego Milito cojo, Gaby Milito en situación emocional comprometida, Sergio sancionado, Zapater exhausto, Juanfran roto y Cuartero y Aranzábal de apoyo ficticio en los laterales, la improvisación vuelve a ser obligación del técnico de Torrero.

Ni aún ahora se difumina la gran cooperación en la plantilla. Victor se lleva a todos, mancos, cojos o tuertos, con el fin de hacer piña. Ya que la afición no podrá acompañar, al menos que el grupo esté compacto. Allá viajan también Gil y Eneko quizás los más destacados jugadores del estrepitoso fracaso del filial. La alineación de circunstancias, pero notable para sacar lo que se necesita.

Y sin descentrar la atención de Huelva, nos encontramos con Saviola. Es la sorpresa. Si todo sale bien, Diegol tendrá su fiel escudero por fin. Agapito trabaja bien. Esperemos que esta afirmación se verifique en unos meses.