Naufragio en Murcia

Se cumplió lo que el Zaragoza había anotado en su hoja de ruta. La sensaciones no eran buenas y se corroboraron anoche en un partido más bien nefasto del conjunto blanquillo, que en ningún momento dio sensación de poder dominar a un Murcia que, pese a todo, tampoco mereció ganar.

El calendario benévolo que se le presentó al Zaragoza pasa a ser el peor enemigo. Cruzarse con rivales teóricamente asequibles cuando la Liga no hace más que comenzar tiene sus riesgos, y el Zaragoza suele caer en todos ellos. Pero, al menos el año pasado, en Coruña, las sensaciones que dejó el equipo ya fueron de una progresión y un ritmo notable en el juego.

Del naufragio se salvó Oliveira. Una pegada descomunal la del brasileño, que marcó un gol para quitarse el sombrero. Lástima que ayer los demás no llevaran ni pantalones, y al final el Murcia los desnudara con casi nada. Simplemente aprovechó dos fallos defensivos, uno de todo el conjunto y otro de Zapater, muy espeso anoche.

Para colmo Matuzalem, que tan buenas noticias había provocado en los calurosos días del verano aragonés, no apareció, y cuando lo hizo fue para realizar una entrada durísima a Regueiro. Para mí es naranja, con lo que el criterio del colegiado pudo estar acertado. ¿Aimar? Dicen que jugó....como el año pasado.

P.D: Por supuesto, desde Corazón Zaragocista no podemos dejar de mandar muchos ánimos al jugador del Sevilla, Antonio Puerta, quién permanece en la UCI tras varias paradas respiratorias en el encuentro de anoche ante el Getafe.

Foto: El Periódico de Aragón